En esta y las próximas entradas de nuestro blog hablaremos de las Asociaciones declaradas de Utilidad Pública. Hoy expondremos de las ventajas que conlleva dicha declaración.

En primer lugar, a las asociaciones declaradas de utilidad pública la ley les reconoce determinadas exenciones y beneficios fiscales de los que no gozan las entidades no declaradas como tales. Por ejemplo, las primeras tributan al 10%, mientras que las segundas lo hacen al 25%.

Además, las asociaciones declaradas de utilidad pública tienen más posibilidad de obtener subvenciones y ayudas públicas, así como los derechos y beneficios establecidos por las Comunidades Autónomas que desarrollen sus actividades principalmente en su ámbito territorial.

La asistencia jurídica gratuita en caso de juicio también es uno de los derechos de los que gozan estas asociaciones, junto con el de utilizar la expresión “Declarada de Utilidad Pública” a seguidas de su denominación en cualquier tipo de documento, cuestión esta no baldía puesto que dicha mención le otorga un plus de seriedad y credibilidad a la asociación, tanto a efectos de posibles asociados, como a la hora de solicitar cualquier tipo de ayuda o subvención, sea pública o privada.

Pero, además de para la asociación, la declaración de utilidad pública también conlleva ventajas para los asociados pues estos podrán deducir parte de la cuota en su declaración del IRPF así como de las donaciones que hubieran realizado a la asociación, en función de una escala legalmente establecida.

Como ves, los beneficios de obtener la declaración de utilidad pública son muy atractivos. En la próxima entrada hablaremos de los requisitos que deben cumplir las asociaciones para obtenerla.